No recuerdo donde leí en cierta ocasión
que la diferencia entre la izquierda y la derecha reside principalmente en que
mientras la izquierda posee una ideología, la derecha no es más que un conjunto
de intereses económicos. El socialismo, además asienta su ideología sobre una
serie de principios éticos que en ningún caso ni circunstancia pueden ser
arrinconados, y el caso de Ponferrada, si no se asumen responsabilidades
políticas más allá de las estrictamente locales, significa una completa
alteración de los principios socialistas.
El Congreso de Sevilla, ni nos
sirvió para diseñar una salida posible y creíble a la crisis económica desde la
izquierda, ni mucho menos para adoptar un modelo organizativo que facilitara la
participación, la transparencia y la democracia interna. Y de esos polvos vienen
estos lodos.
El caso Ponferrada no es un
error, es una torpeza política y una falta de respeto a los ciudadanos y a los
principios socialistas, y esta torpeza tiene como consecuencia que el Secretario
de Organización Federal y, a la vez, Portavoz en las Cortes de Castilla y
León queda desacreditado por su
actuación.
Pero también el Secretario
General y el resto de la Ejecutiva Federal salen mortalmente dañados de este
trance por la tardía reacción frente a una situación insostenible. No se puede
aceptar que se transmita la idea de que estamos dispuestos a pagar cualquier
precio para conseguir una alcaldía.
La cuestión es que la Ejecutiva
Federal había dado el visto bueno a pactar con un grupo político liderado por
un sujeto condenado por acoso sexual. Y como argumento solo se les ocurre que tal pacto era "legal". ¡Solo
faltaba, que encima no fuese
"legal"!. Si seguimos así, la legalidad nos va a llevar al infierno.
Son demasiados errores durante
demasiado tiempo, y la incapacidad de Rubalcaba para defender la ética lo
inhabilita para dirigir el PSOE, pero también lo descalifica como socialista,
así como a toda la ejecutiva que lo tolera. El PSOE es más que un
dirigente...necesitamos ser valientes y recuperar nuestros idearios, nuestros
principios, nuestra libertad y nuestro Partido.
Soy militante socialista desde el
año 1982 y nunca había visto tal desbarajuste desde la dirección. Un partido
político debe ser más contundente y saber cómo funciona lo orgánico y lo
institucional. Tenemos un equipo Federal falto de ideas y a remolque de los
acontecimientos.
O se cambia a los dirigentes de
los partidos mayoritarios ya mismo o la Democracia española correrá riesgos.
Ya sé que el PP no puede cambiar
a nadie porque todo su entramado se vendría al suelo en unos días. ¿Pero, el
PSOE? El PSOE puede (y debe) cambiar ya a su dirección. El esperpento de
Ponferrada sólo admite dimisiones y apertura del proceso electoral interno. Ya
mismo.
He escrito varias veces la
palabra “ética”. Me parece clave, me parece fundamental. O este partido
recupera el orgullo de defender la ética política, o aparecerán nuevas formas (que
desconozco) de gestionar lo público.
Es el momento de la generosidad
con el Partido, la democracia y el socialismo. Algunos han de dar un paso atrás
para que pueda nacer un nuevo camino, de forma urgente, sin aplazamientos ni
dilaciones, para recuperar el genuino proyecto socialista, cambiar y renovar
profundamente el PSOE y, así, restablecer nuestra sintonía con la mayoría de
ciudadanos y ciudadanas que reclaman alternativas transformadoras y de progreso
social.
Es el momento de dar paso a
nuevos dirigentes, paso a alguien que nos devuelva la ilusión y las ganas a
todos los socialistas
Compañero Alfredo Pérez
Rubalcaba: te he entendido hasta hoy, te he apoyado hasta hoy (como muchos
militantes) pero desde hoy te pido por favor que te vayas; que te vayas
ordenadamente, convocando el proceso electoral que te parezca oportuno, pero
que te vayas. Te agradecemos los servicios prestados pero........¡vete ya porque
nos estás haciendo mucho daño!.
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