Seguro
que cada uno tiene sus motivos para preocuparse, asustarse o pensar que todo lo
que nos sucede como país es una gran peonza política que gira en movimiento
continuo sin ir a ningún lado.
Seguro
que a muchos se les ha pasado por la cabeza mandar a tanto granuja al pedo.
Seguro
que a ti, a mí, a nosotros,…a tantos, se nos ha ocurrido muchas veces que no
merece la pena torturarse por el destino de una nave colectiva que se nos va al
carajo.
Pero
lo cierto es que ellos quieren vernos ignorar nuestro futuro y más cierto es
aún que en esa nave no todos viajamos en la misma clase de pasajeros. Todos
somos ciudadanos pero hay clases sociales y los intereses entre ellas son
irreconciliables. Que a lo mejor no lo sabías o no lo querías saber porque te
parece antiguo.
Si
miramos sólo la apariencia de este sindiós político en el que un tipo
aparentemente imbécil, más inteligente que sus oponentes, sea investido
Presidente con la complicidad de un partido que se hace el harakiri por mandato
superior, otro que jugó con los dos anteriores vive sin vivir en sí y el que
pretende vender que es diferente sólo intenta heredar el estatus del que va camino
de convertirse en irrelevante, sólo encontraremos el humo de la mentira que se
desvanece entre los dedos de nuestras manos.
Si
eres de los que crees que los políticos de todos esos grupos políticos son unos
sinvergüenzas, no te faltará razón, pero no dejarás de ser uno de esos ciegos a
los que el sol calienta en sus ojos muertos sin darles el más leve rayo de luz.
Te quedas en la superficie de las cosas. Tu indignación de taberna es incapaz
de comprender más allá de tu deseo de ahorcar a algún político. Me preocupa más
que puedas entender hasta dónde ha de llegar tu rabia y quieras detenerla antes
porque seas uno de esos que piensan que siempre hay que acercarse al que tiene
dinero y que el actual sistema económico te parece bien mientras te caiga algo
de pitanza.
Admito
que ante gente como tú me irrito menos que ante los cándidos y los cínicos (de
todo hay en la viña del señor) de la ilusión democrática; esos que dicen que
con un poco de honestidad de los políticos, algo de corazón de los empresarios,
unas dosis de economía colaborativa (la ponzoña de la “economía del bien común”
ya se les va gripando como expresión), un par de bobadas sobre participación en
proyectos municipales en los que no opina casi nadie y dos propuestas sobre
transparencia (cómo legalizar la corrupción) se acaban todos los problemas y
hasta se le cura el acné a Carlitos, que lo suyo era un poema.
La
ingenuidad sobre el proceso político español, la mala baba que sólo se acaba en
los políticos o la estupidez que habla de crisis de régimen cuando el
capitalismo goza de la mejor de las saludes como sistema incuestionado (la
fórmula del capitalismo refrenado es complicidad obscena a estas alturas) no
resuelve nada.
Los
millones de españoles en paro, los cientos de miles que ya no cobran o nunca
cobrarán desempleo, los enfermos que mueren por desatención médica en una
sanidad pública que está siendo destruida, los también millones de españoles
que no cobrarán una pensión, la enorme cifra de personas que están bajo el
umbral de la pobreza; todos esos, y muchos otros castigados por algo que
llamamos crisis pero queremos ignorar qué la produce, no creo que vayan a ser
mejor o peor tratados si les gobernase el PP, con mayor o menor colaboración
del PSOE, o una coalición de un montón de alternativos a no se sabe qué, con o
sin coleta.
Nos
van a fundir de nuevo. Nos van a meter un recorte de al menos 15.000 millones
de euros antes de que acabe 2017. Van camino de acabar con las pensiones
(crees que contigo no va porque tienes menos de 40 años, pobriño). Nos van a crujir de
nuevo con el IVA. Hay planes para recortar aún más el gasto en sanidad y en
farmacia. Puedes seguir haciéndote selfies y contemplando el universo de las
pelusillas de tu personal ombligo, despreciando lo que pasa a tu alrededor.
Pero
como el objetivo de los recortes no se limita a pasar del 4,6% del déficit
presupuestario de 2016 al 3,1% en 2017, los recortes no se quedarán ahí sino
que continuarán porque el objetivo real es el déficit 0%. Eso significa que en
2018 los recortes han de llegar a los 26.000 millones. Suma y sigue ¿Qué te
parece?
Por
encima de los políticos que hacen como que gobiernan está un sistema económico
(se llama capitalismo) que sólo puede obtener ganancias arrebatándote las
migajas con las que te conformaste en su día y que te parecían grandes porque
hubo una época en la que podías gastar más allá de tus necesidades.
La
fiesta hace tiempo que acabó pero puede que aún creas que la cosa puede
mejorar. Van ya 8 años de la crisis y a ti te va a ir a peor, a mucho peor de
lo que imaginabas. Y en eso poco importa quién gobierne o si lo hace sin
mayoría absoluta porque todos los partidos que aceptan este sistema económico
están para obedecer al capital.
Puedes
seguir disfrutando de García Ferreras en Al Rojo Vivo, de Mujeres y Hombres y
Viceversa, del Sálvame o del Salvados para progres pero, si no te organizas, si
no estás dispuesto a salir a la pelea, apártate y no entorpezcas porque toca
pelear y zombies y esquiroles no aportan nada.
¿A
ti no te han dicho que hay una cosa que se llama capitalismo y que te va dejar
hech@ unos zorros, pimpollo?
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